Así se titulaba el primer artículo de Nervae del año 1998 cuando el ayuntamiento compró la plaza de toros municipal y ponía un plazo de dos años para que todos los nervenses pudiésemos volver a disfrutar de sus instalaciones para nuestro disfrute, en dicho artículo se decía textualmente: “ ...En dos años, la villa podrá recuperar la tradición que comenzó a fortalecerse en 1888…”. Además de vanagloriarse dando datos concretos de cómo sería la plaza de toros después de la remodelación de la plaza, cuyas obras comenzarían de forma inminente según el grupo político que por aquel entonces estaba en el poder que, curiosamente, es el mismo que nos gobierna hoy día…
Pues bien, a día de hoy, después de 8 años de aquellas declaraciones del consistorio del PSOE, ningún nervense ha visto ningún toro correr por la plaza de toros de Nerva, después de 8 años, el estado de abandono de tan emblemático monumento (en el que además de torear los mejores, se fraguaron innumerables luchas obreras y compartieron tribuna los principales oradores del movimiento obrero nacional: Egocheaga, Pablo Iglesias, etc.) ha sido patente hasta hace bien poco.
En su revista de febrero, la agrupación local del PSOE hace gala del despotismo más absoluto anunciando a boca llena la de la plaza de toros gracias a taller de empleo que el gobierno municipal está desarrollando en cooperación con la Mancomunidad
Bien hecho, la plaza de toros necesitaba una restauración inminente, o eso o dejar que se cayera, pero esta restauración la necesitaba desde que el ayuntamiento la comprara en 1998 y viene con 8 años de retraso según sus propias palabras… menos lobos caperucita...
* Publicado en La Garceta, nº 3. Septiembre 2006.